25.8.13

BlogLovin

<a href="http://www.bloglovin.com/blog/10432383/?claim=k8vfmjbegj5">Follow my blog with Bloglovin</a>

14.12.11

Mi unico Hyung -10-




Todo el mundo se queda prendado por la luz que irradia Kim Jae Joong. Siempre rodeado de gente, admirados por su belleza y su carácter, aunque nunca da una primera buena impresión una vez estas en su honda no serás capaz de librarte de ella. Yo no soy una excepción, aun así intento que me afecte lo menos posible pero teniéndolo tan cerca de mi no pude ignorarlo por más tiempo.

Mi hyung que esta siempre rodeado de gente que lo ama (o al menos lo parece de lejos), se ve tan solo cuando estas cerca de él. Me di cuenta y ahora no puedo dejarlo.

Esa soledad de la que esta rodeado se debe a un mecanismo de defensa, para no ser herido… Sabe que no puede ser ignorado pero es débil y ahora deseaba protegerlo de si mismo.

Mi cuerpo reaccionaba automáticamente a cosas que nunca había experimentado. El beso que yo mismo había comenzado se había vuelto una batalla por el control. Nuestras bocas se abrían y cerraban alrededor de la otra, nuestras lenguas se acariciaban lenta y tortuosamente haciendo crecer la impaciencia de ambos.

Sus labios, gruesos, redondos, rojos, perfectos… eran míos, no podía dejarlos pero Jae es habilidoso y mas bien era él el dueño de los míos, finos y cortados ahora húmedos por la excitación repentina de nuestras bocas.

Me asuste un poco al sentir su lengua contra mis dientes por primera vez y sinceramente no le habría dejado paso concientemente si no fuera por la falta de oxigeno… Mi corazón estaba desbocado y mis pulmones ahora solo se alimentaban de tu aliento.

Cuando note que te separabas lentamente la decepción salio de mi boca en forma de quejido. Era una reclamación inconsciente. Oí tu risa y luego note como posabas tu boca contra mi cuello, bajando lentamente, haciendo me sentir completo de nuevo con cada lamida, el bello se me erizo por la nueva sensación y fue maravilloso. Tus manos que estaban sujetando mi nuca bajaran acariciando mi piel ahora levemente caliente. Comenzaste a desabrochar mi camisa sin ninguna prisa. Mi corazón iba cada vez más y más deprisa.

Estaba tan confuso, todo iba demasiado lento, ya que mi impaciencia crecía y crecía a cada uno de tus movimientos y al mismo tiempo demasiado iba todo de forma rápida, ya que no sabia como reaccionar ante los estímulos que me mandabas.

Fundí el ceño ante la impotencia de sentirme totalmente inútil por lo que decidí que era el momento de cambiar los roles, después de todo yo lo había comenzado.

Pose mis manos sobre su espalda haciendo fuerza hacia mi, pegándole a mi pecho, estoy seguro que te pillo totalmente con la guardia baja aunque no hubo queja cuando ahora era yo el que estaba encima de ti, con las rodillas sobre la cama, sonriendo victorioso ante mi hazaña. Una sonrisa que tuve que hacer desaparecer para volver a tomar esos labios que hacían que mi cabeza se volviera contra mi cuerpo para que parar algo totalmente irracional.

¿Qué seria más fuerte? ¿Mi cabeza o mi corazón?

Un corazón completamente confuso que se deja llevar por el momento, ahora latía fuertemente. Mi mente llevaba la delantera claramente. Porque cuando deje tus labios para poder mirarte se me escapo algo que podía cambiarlo todo.

-Hyung… -me desconcentro por un momento cuando paso su tentadora lengua por esos labios pecaminosos, comencé de nuevo a poder mis pensamientos en orden. -Jae, ¿vas a dejar que esto siga así? Aun sabiendo que yo no estoy seguro de que te amo…. –mi voz tenia un tono dulce o al menos lo imitaba muy bien.

Me miraste fijamente y sonreíste desviando la mirada hacia la puerta que se encontraba detrás de mí.

-Minnie… no se porque no puedes ver tus propios sentimientos claramente, yo se que me amas…

-¿Te amo? No lo se, lo que si deseo ahora es tu cuerpo, te deseo como no te desee nunca. -le conteste con franqueza. –Normalmente en estas situaciones huirías… para no ser dañado… -seguía miradote a los ojos, no era reciproco.

-Entonces solo es deseo… -en la oscuridad no distinguía ninguna expresión.

-Ahora es lo único que tengo claro. –la sinceridad se me escapaba por entre los poros.

-Si tanto me deseas, hagámoslo, tú no pierdes nada.

-Quizás… pero tú si…

Me contestaste a eso con un movimiento de manos, despojándome de mi camisa por entero. Suspire en la oscuridad.

-Jae, no lo hagas, por favor… -deje sin resistirme a ti en ningún momento. La lucha entre mi mente y mi cuerpo volvía.

-Se que no quieres que pare. –respondiste sinceramente

-No quiero hacerte mas daño - en ese momento Jae dejo caer sus manos a los lado de su cuerpo y por fin me miro directamente. Sus ojos grandes y brillantes en la penumbra me intimidaron.

-Ya he parado. Ahora que quieres que haga. ¿me voy? -esta vez tu voz era fría y no supe que responder. Aunque no podía verte por completo, note como tus ojos se desviaban hacia la puerta nuevamente, algo llamo tu atención. -será mejor que me vaya… -Se levanto de la cama pero yo lo sujete de la muñeca. No dije nada, no podía o mejor dicho no sabia que decir.

-Se acabo. Estoy harto del rechazo, de la inseguridad. Déjame -tu voz no era firme, ni Oria. Sonaba insegura, y temblorosas. Quizás quieras llorar, pero no lo harías, no delante de mí.

Le solté y vi como salía por mi puerta con paso apresurado.

Tal y como estaba me metí en la cama y cerré los ojos con fuerza. Quiera imaginar que nunca entraste a mi cuarto esa tarde, que nunca me metí en un baño de mujeres contigo, que nunca te vi abrazar a Yunho después de una de nuestras peleas. Que jamás te me declaraste. Por mucho que pensara en ello, los hechos eran inalterables y permanentes.

Cuando mi mente se canso de ti, me quede dormido al fin. Ni siquiera sabia que hora era, pero oí las voces de Yoochun y Junsu pasar cerca de mi puerta, por lo que deduje que serian las nueve pasadas.

Me dolía la cabeza pero aun así me levante de la cama y me volví a poner la camisa. Salí de mi habitación y me dirigí a la cocina. Tenía hambre.

-¡Hombre! pero si es el bello durmiente. ¿Te acabas de levantar? -me pregunto Junsu con dos platos en la mano.

-mmm si -me limite a contestar mientras sacaba un bol para poner cereales en él.

-¿Te has pasado toda la tarde durmiendo? - miro a Yoochun y le puso la palma de la mano delante de la cara -he ganado la apuesta, a pagar -dijo soliendo.

-Minnie, me has fallado. Y yo que puse esperanzas en ti -me dijo en todo de reproche Yoochun y de mala gana le puso un billete en la mano que le habia tendido -toma. Yo no vuelvo a apostar contigo.

-Soy feliz -me miro Junsu con una sonrisa de oreja a oreja -gracias Minnie.

-De nada, supongo -comí en silencio mientras Junsu y Yoochun discutían o mejor dicho Yoochun hacia rabiar a Junsu. No quería pensar en nada, por lo que puse especial atención a la conversación que tenían ellos mientras comía lentamente.

-Por cierto ¿alguien ha visto a Jaejoong hyung? no estaba en su cuarto cuando llegamos.

-Changmin, ¿sabes donde esta Jae? -me pregunto Yoochun. Simplemente negué con la cabeza.

-Que raro, dijo que no saldría hoy y lo más raro de todo es que no ha llamado a Yunho en todo el día.

-¿No ha llamado a Yunho? con lo pesado que se pone cuando nos separamos. eso si que es raro.-termino de decir Yoochun. No me gusto nada el todo de la última frase. Él no me miraba pero me di cuanta rápidamente de que mas tarde me interrogaría o me reprocharía algo.

Yoochun estaba muy unido a Jaejoong. Eran muy amigos y se contaban muchas cosas, se conocian muy bien el uno al otro o eso pensaba yo. Yoochun entendía a Jaejoong y Jaejoong a Yoochun pero a veces llegaba a ser un enigma, incluso para Jae.

En ese momento llego Yunho a casa, parecía muy contento. Hacia mucho tiempo que no veía a sus padres y a su hermana y pasar el día con ellos seguramente le quito todo el estrés que había acumulado en estos días de trabajo intensivo.

-¡Qué pronto llegas! ¿Qué tal esta tu familia? -Junsu no sabía callar

-Hola chicos, bien todo va bien y por eso vengo tan contento ¿Qué tal el trabajo? espero que bien

-Perfecto, como siempre -dijo él orgulloso.

Yunho se puso a comer las sobras de la comida, al igual que Yoochun y Junsu. Jaejoong lo había dejado todo preparado en la nevera para que no tuvieran que hacer nada más que servírselo en el plato.

-¡Oye! ¿No falta alguien aquí? ¿Y Jae? -pregunto Yunho cuando termino de comerse la cena.

-No lo sabemos, cuando llegamos a casa solo estaba Changmin durmiendo.-contesto Yoochun.- y él tampoco sabe nada.

-Voy a llamarlo -dijo finalmente Yunho con el ceño un fruncido.

Cogío el móvil y salio de la cocina hacia su habitación. Yo salí detrás de él para dirigirme a mi cuarto, pero cuando oí una melodía familiar salir de cuarto de Yunho me quede estático en el pasillo.

-¡Oh!- exclamo Yunho. -pero si estabas aquí -dijo mientras abría la puerta. Yo me asome detrás de él para poder ver Jaejoong tumbado en la cama de Yunho boca abajo.

Mi sorpresa era tal que cuando quise darme cuata habia entrado al cuerto sin permiso.

-¿Qué haces aquí? -indague

-Dormir, ¿no lo ves? –su tono era rebelde hacia mi.

-¿Por qué en mi cuarto? -pregunto esta vez Yunho algo sorprendido por el tono de Jae

-Te estaba esperando…

Su respuesta me sorprendió. ¿Qué intentas Jae?

7.12.11

Perfil - Bel Eggers - Capturado por mi objetivo


 
  • Nombre: Bel
  • Apellidos: Eggers
  • Edad: 17
  • Componentes de la familia: Hermana y padres
  • Cosas que me gustan: tocar la guitarra y el piano, bailar poppin’, el verde, el frío, el ramen y la historia. Los animales, en ocasiones la soleda, las personas que me cuidan, viajar y los idiomas. que me mimen y el baloncesto.
  • Cosas que odio: que la gente me hable mucho de ellos, recoger (tareas domésticas en general), no conseguir lo que me propongo, que me digan qué tengo que hacer, la gente que huele a sudor, el pescado (el sushi me gusta), que no pillen mi sentido ácido del humor
  • Manías: Cuando me enfado con alguien lo pago con todo el mundo, soy bastante tímida al principio pero luego me suelto. Me gusta tener mis momentos de reflexión diarios, soy muy perezosa menos a la hora de trabajar para conseguir mis sueños, si estoy triste me enfado en lugar de llorar, me arranco pieles del labio todo el rato y eso hace que me sangren, no dejar de moverme en todo momento (soy un poco hiperactiva)
  • Persona que amo: Son Dongwoon
  • Resumen de mi historia: Bel nació en Munich, Alemania, de ahí que sepa hablar Alemán. Cuando tenía cinco años su familia se mudó a España para mejorar su calidad de vida. Desde pequeña siempre ha tocado el piano y bailado ballet, hasta que un día descubrió el poppin’. Una vez en España, concretamente en Madrid, empezó a tener clases de guitarra y canto, pues su sueño es convertirse en artista. Su familia tiene mucho dinero, aunque no suele hablar de ello porque odia que la llamen niña de papá, de hecho cuando iba al colegio le hacían bullying por eso. Debido a que no hay escuela de artes escénicas en Madrid, decidió mudarse a Barcelona con 16 años para cumplir su sueño. Sus padres siempre la han apoyado en todo y le compraron un piso céntrico, el cual no usa mucho debido a que vive prácticamente en la academia. Se esfuerza mucho y ha llegado a entrenar durante 15 horas seguidas, haciendo que terminara por desmayarse. El hecho de que sea tan cabezona respecto a sus sueño preocupa a los de su alrededor, quienes creen que se llega a hacer daño a si misma. La relación con su hermana pequeña es muy mala, y desde que se pelearon con 14 y 12 años nunca más se han vuelto a hablar. Ella le reprocha a Bel que sea la niña de los ojos de sus padres y que a ella no le dejen tanta libertad. Bel conduce una Yamaha roja y le encantan las Harleys, pero duda que pueda tener una algún día debido a la delgadez de su cuerpo. Come mucho pero apenas engorda (otro de los hechos por los que sus amigos se preocupan). Siempre viste con Vans o Converse, y en ocasiones botas negras. Adora los vaqueros y pantalones negro pitillo y las camisetas de colores de chico.  Siempre que se enfada se pone los cascos y se aisla del mundo, y en ocasiones se va al parque de noche a jugar al baloncesto. Tiene cambios de humor pero normalmente siempre es feliz y alegre, y nunca deja de sonreír. Puede se rmuy maleducada, y cuando quiere conseguir algo actúa de una forma muy cute, con mucho aegyo, aunque no le gusta mucho tener que llegar a tal extremo. Pasa de los que la odian, aunque suele ser vengativa, por lo que antes de irse a Barcelona se vengó de todos y cada uno de los que le habían hecho la vida imposible durante su infancia. Es callada y observadora, por lo que llega a conocer a la gente a tales extremos que da incluso miedo, es más, nunca se abre por completo a nadie sin haberlo analizado primero. Es muy calculadora respecto a sus actos ya que no le gusta hacer daño a la gente, aunque su humor es un tanto ácido y en ocasiones se mete en grandes malentendidos. Amiga de sus amigos, daría todo y más por ellos, pero muchas veces los descuida y no se da cuenta. Odia estudiar pero le gusta mucho conocer gente y el mundo. Habla Inglés, Francés y Alemán a la perfección, casi mejor que el Español. Intenta aprender Japonés y Coreano en sus tiempos libres, aunque son pocos, por lo que siempre recurre a otra persona para traducirle las cosas en esos idiomas. Le encanta todo lo relacionado con Japón y Corea, de hecho solo se ha enamorado una vez y terminó mal debido a su amor por estos países y a la incultura del chico.